jueves, 29 de mayo de 2014

La actitud determina el estado de ánimo

¿Alguna vez has tenido la sensación de vivir un día pésimo desde que te levantas hasta que te acuestas? no te sale nada de lo programado, en los entrenamientos todo te sale al revés, por el contrario, ¿no te ha pasado que de repente sientes que te comes el mundo y que todo lo que acontece a tu alrededor parece estar en sincronía contigo? Todo te sale, es genial!!

Lo que determina uno u otro estado es la actitud con la que nos enfrentamos a él. El mundo según lo vemos no es más que un reflejo de nuestro estado interior: cuanto más optimistas seamos a la hora de interpretar lo que nos pasa, mejor valoración haremos de nosotros mismos (autoestima) y mejor adaptación al medio tendremos. Por tanto, toda actitud positiva comienza por tener una autoestima saludable.


Cuando nos sentimos decaídos, lo primero que perdemos es la voluntad, aquello que definimos como "las ganas". Sabiendo que la voluntad es nuestra capacidad para decidir si realizar un determinado acto o no, ¿por qué escoger quedarse en la oscuridad pudiendo ver la luz?. Para tener una buena predisposición a la acción voluntaria es aconsejable ser receptivo, priorizar los pasos, visualizar positivamente aquello que queremos que suceda…y sucederá.

Otra de las cosas que hemos de realizar es salir de la zona de confort, definiendo zona de confort como todo aquello que nos rodea y con lo que nos sentimos cómodos. ¿Cómo salir de la zona de confort?  explorando nuevos horizontes y dejar que la vida nos sorprenda, arriesgarse!!. Perder el miedo a avanzar, a descubrir nuevos mundos y buscar oportunidades que nos aporten nueva sabiduría. Cuando decidimos explorar más allá de los límites que nos autoimpusimos empezamos a entrar en lo que se conoce como la "zona de aprendizaje".

Una de las maneras de mejorar nuestra actitud es tener claro estas tres palabras: Quiero, puedo, me lo merezco. Tenemos que tener claro que lo que nos define no son las opiniones positivas que los demás puedan tener o las críticas a las que nos veamos expuestos, sino la valoración que hacemos de nosotros mismos. Es decir, de la autoestima.



Y por supuesto la Autoestima, es el camino al bienestar. Para hacer que mejore, es recomendable y muy importante que nos aceptemos, tengamos confianza plena en lo que hacemos, nos cuidemos a nosotros mismos, seamos autosuficientes emocionales, aprendamos a poner límites, realicemos autocrítica constructiva, sepamos que somos los únicos responsables de lo que nos pasa, nos dediquemos un momento al día solo para nosotros, escuchemos música y apostemos por el sentido del humor, entre otras muchas cosas que podemos hacer.

“Los logros productivos son consecuencia y expresión de nuestro nivel de autoestima. El respeto comienza con uno mismo.” Nathaniel Branden

Félix Carnero
Técnico en Psicología del Deporte

No hay comentarios:

Publicar un comentario